Descubre el fascinante mundo de las tiendas de raya: el origen y funcionamiento

Las tiendas de raya fueron una parte fundamental de la vida en México durante gran parte del siglo XX. Estas tiendas surgieron como una forma de control económico y social por parte de los propietarios de las haciendas y empresas, quienes proporcionaban a sus trabajadores crédito para comprar productos básicos en la misma tienda donde trabajaban. Sin embargo, este sistema también llevó a la explotación laboral y a la dependencia de los trabajadores de las empresas.

En este artículo exploraremos en más detalle la historia y funcionamiento de las tiendas de raya, así como sus consecuencias sociales y económicas. Veremos cómo funcionaba el sistema de crédito, las condiciones laborales a las que estaban sometidos los trabajadores y los cambios que se han dado desde entonces. Además, analizaremos la importancia de estos establecimientos en la vida de las comunidades rurales y su impacto en la economía del país.

Índice

Las tiendas de raya: ¿qué son y cómo surgieron?

Las tiendas de raya son establecimientos comerciales que surgieron durante el siglo XIX en México y otros países de América Latina. Estas tiendas eran propiedad de los dueños de las haciendas o de las empresas donde trabajaban los obreros. Su objetivo principal era controlar y limitar el acceso de los trabajadores a bienes y servicios.

El término "tienda de raya" proviene de la práctica de marcar las cuentas de los trabajadores en rayas en un libro de contabilidad. De esta manera, los trabajadores tenían que adquirir productos y servicios únicamente en estas tiendas, donde los precios eran más altos y los productos de menor calidad.

Este sistema permitía a los propietarios de las tiendas de raya tener un control absoluto sobre los trabajadores, ya que estos quedaban endeudados con ellos. Los trabajadores debían comprar todo lo necesario para su subsistencia en estas tiendas, desde alimentos hasta utensilios domésticos.

El contexto social y económico de las tiendas de raya

Las tiendas de raya surgieron en un contexto de desigualdad social y económica. Durante el periodo conocido como el Porfiriato en México (1876-1911), el país experimentó un rápido crecimiento económico, pero este desarrollo estaba concentrado en manos de unos pocos. La mayoría de los trabajadores se encontraban en condiciones de extrema pobreza y dependían de las haciendas o empresas para sobrevivir.

Las tiendas de raya se convirtieron en un mecanismo de control y explotación de los trabajadores. Los dueños de las haciendas o empresas les pagaban un salario muy bajo, que muchas veces apenas alcanzaba para cubrir las deudas contraídas en las tiendas de raya. De esta manera, los trabajadores quedaban atrapados en un ciclo de deudas y dependencia.

El fin de las tiendas de raya

Las tiendas de raya fueron objeto de críticas y protestas por parte de los trabajadores y de algunos sectores de la sociedad. Estas críticas se intensificaron durante la Revolución Mexicana (1910-1920), cuando se cuestionaron las prácticas de explotación y desigualdad social.

Con el tiempo, las tiendas de raya fueron perdiendo su poder e influencia. Las leyes laborales comenzaron a proteger a los trabajadores y se prohibió la existencia de este tipo de establecimientos. Además, el desarrollo económico y la creación de otras formas de comercio permitieron a los trabajadores acceder a una mayor variedad de productos y servicios a precios más justos.

Hoy en día, las tiendas de raya son consideradas como una parte importante de la historia de México, que representa la lucha por la justicia social y laboral. Aunque ya no existen en su forma tradicional, su legado perdura como símbolo de resistencia y lucha de los trabajadores por mejores condiciones de vida.

El papel de las tiendas de raya en la historia económica

Las tiendas de raya han sido un elemento clave en la historia económica de muchas regiones, especialmente en América Latina. Estas tiendas fueron establecimientos comerciales utilizados en el pasado para controlar y explotar a los trabajadores, generalmente en plantaciones agrícolas o minas.

En estas tiendas, los trabajadores recibían un salario en forma de crédito o vales en lugar de dinero en efectivo. Estos vales solo podían ser canjeados en la misma tienda de raya, lo que generaba una dependencia económica y social de los trabajadores hacia el patrón o empleador.

Funcionamiento de las tiendas de raya

Las tiendas de raya ofrecían una variedad de productos básicos, como alimentos, ropa, utensilios y otros objetos necesarios para la subsistencia de los trabajadores y sus familias. Estos productos solían tener precios elevados en comparación con el mercado local, lo que perpetuaba la dependencia económica de los trabajadores hacia la tienda.

Cada trabajador tenía una cuenta abierta en la tienda de raya, en la cual se iban registrando los gastos realizados. Al finalizar un periodo determinado, generalmente mensual, los trabajadores recibían su salario, que consistía en el monto total de crédito acumulado en su cuenta. Este salario podía ser utilizado únicamente en la tienda de raya, lo que limitaba las opciones de consumo de los trabajadores.

Efectos negativos de las tiendas de raya

Las tiendas de raya generaban una serie de efectos negativos tanto para los trabajadores como para las comunidades en las que se encontraban. En primer lugar, perpetuaban la explotación laboral al controlar y limitar el poder adquisitivo de los trabajadores. Además, al tener precios elevados, los trabajadores gastaban una gran parte de su salario en la tienda, lo que reducía su capacidad de ahorro y dificultaba su movilidad económica.

Otro efecto negativo de las tiendas de raya era la creación de una deuda constante por parte de los trabajadores. Como los precios en la tienda eran altos, los trabajadores no podían cubrir la totalidad de sus gastos con su salario, lo que generaba una deuda acumulativa que los mantenía en un ciclo de dependencia económica.

Legado de las tiendas de raya

A pesar de que las tiendas de raya han sido objeto de críticas por su papel en la explotación de los trabajadores, también dejaron un legado histórico importante. Estas tiendas fueron un elemento característico de la economía de las plantaciones y minas en distintas épocas y regiones, y su existencia ha sido documentada en muchos estudios e investigaciones.

En la actualidad, aunque las tiendas de raya han desaparecido en su forma original, su legado sigue presente en las dinámicas económicas y sociales de algunas comunidades. Además, su historia nos permite reflexionar sobre los abusos laborales y la importancia de proteger los derechos de los trabajadores en cualquier contexto.

¿Cómo funcionaban las tiendas de raya en el pasado?

Las tiendas de raya eran establecimientos comerciales que surgieron en el siglo XIX y que funcionaban como una especie de tienda de abastos o despensa para los trabajadores, especialmente en el ámbito rural o en zonas donde no había acceso a grandes centros urbanos.

Estas tiendas eran propiedad de las empresas o haciendas en las que trabajaban los empleados, y su objetivo principal era proporcionarles los productos de primera necesidad a cambio de un salario. Sin embargo, el sistema de las tiendas de raya fue objeto de muchas críticas debido a la explotación laboral y condiciones injustas a las que se sometía a los trabajadores.

¿Cómo se estructuraban las tiendas de raya?

En su estructura, las tiendas de raya solían estar divididas en dos áreas principales: una zona de dispensa y una zona de crédito. En la zona de dispensa se encontraban los productos de primera necesidad, como alimentos básicos, utensilios de cocina, productos de limpieza, ropa, calzado, etc.

Por otro lado, en la zona de crédito, los trabajadores podían solicitar créditos o adelantos en dinero que serían descontados posteriormente de su salario. Estos créditos eran utilizados generalmente para cubrir necesidades urgentes o imprevistos.

¿Cómo se llevaba el control de los saldos y los pagos?

Para llevar un control de los saldos y los pagos, cada trabajador tenía una cuenta abierta en la tienda de raya, en la cual se anotaban las compras realizadas, los créditos solicitados, los pagos realizados y los saldos pendientes. Esta cuenta era administrada por el encargado de la tienda de raya y los saldos se iban acumulando mes a mes.

Además, existían libros de registro en los que se anotaban todas las operaciones realizadas por cada trabajador, con el fin de tener un control detallado de los movimientos financieros. Estos registros eran utilizados tanto por la empresa o hacienda como por los propios trabajadores para verificar los saldos y pagos.

¿Cuáles eran las críticas al sistema de las tiendas de raya?

A lo largo de la historia, el sistema de las tiendas de raya ha sido objeto de muchas críticas, principalmente por ser considerado una forma de explotación laboral. En muchos casos, los trabajadores quedaban atrapados en un ciclo de deudas, ya que los precios de los productos en las tiendas de raya solían ser más altos que en otros establecimientos y los trabajadores tenían la obligación de comprar exclusivamente en ellas.

Además, muchas veces los saldos y los pagos no eran transparentes, lo que llevaba a situaciones de abuso por parte de los dueños de las tiendas de raya. También se han documentado casos en los que los trabajadores recibían un salario tan bajo que prácticamente todo se les descontaba en la tienda de raya, dejándoles muy poco o nada de dinero.

En la actualidad, el sistema de las tiendas de raya ha sido prácticamente eliminado debido a las reformas laborales y a los avances en la protección de los derechos de los trabajadores. Sin embargo, todavía quedan vestigios de este sistema en algunos lugares, especialmente en zonas rurales o en comunidades marginadas donde el acceso a servicios y comercios es limitado.

Los problemas y abusos vinculados a las tiendas de raya

Las tiendas de raya han sido durante mucho tiempo objeto de controversia debido a los problemas y abusos que se han relacionado con ellas. Estas tiendas, que históricamente han existido en zonas rurales y comunidades marginadas, suelen estar asociadas con la explotación laboral y la falta de derechos de los trabajadores.

Uno de los principales problemas vinculados a las tiendas de raya es el sistema de crédito que utilizan. Este sistema implica que los trabajadores adquieran bienes y servicios a través de un sistema de deudas que se descuentan directamente de sus salarios. Esto puede resultar en una acumulación de deudas que los trabajadores no pueden pagar, lo que los mantiene en una situación de dependencia y vulnerabilidad.

Otro problema importante es la falta de transparencia en las transacciones realizadas en las tiendas de raya. Muchas veces, los trabajadores no tienen acceso a información clara sobre los precios de los productos que se les venden, lo que les impide tomar decisiones informadas y comparar precios con otras tiendas o proveedores.

También se han documentado casos de abuso y maltrato hacia los trabajadores en las tiendas de raya. Algunos empleadores utilizan estas tiendas como una forma de control y coerción sobre sus empleados, reteniendo sus salarios o imponiendo multas injustas que afectan su capacidad para salir de la deuda.

Además, las tiendas de raya a menudo ofrecen productos de baja calidad a precios inflados, lo que coloca a los trabajadores en una posición de desventaja económica. Esta práctica también dificulta la movilidad social y el desarrollo económico de las comunidades donde se encuentran ubicadas las tiendas de raya.

Los problemas y abusos vinculados a las tiendas de raya son una realidad preocupante que debe abordarse. Es necesario establecer regulaciones adecuadas para proteger los derechos de los trabajadores y promover la transparencia y equidad en estas transacciones comerciales.

La evolución de las tiendas de raya: de su origen a la actualidad

Las tiendas de raya han sido una parte importante de la historia económica de muchos países. Originadas en el siglo XIX, estas tiendas se establecieron como una forma de control por parte de los dueños de las plantaciones sobre los trabajadores. En este artículo veremos cómo han evolucionado las tiendas de raya desde su origen hasta la actualidad.

Origen de las tiendas de raya

Las tiendas de raya surgieron en el contexto de las plantaciones agrícolas en América Latina y otros lugares del mundo. Los dueños de las plantaciones necesitaban una forma de asegurarse de que los trabajadores no se fueran a buscar trabajo en otros lugares, por lo que decidieron establecer tiendas en las propias plantaciones.

Estas tiendas operaban con un sistema de crédito, en el cual los trabajadores podían obtener alimentos y otros productos a cambio de futuros salarios. Sin embargo, el sistema estaba diseñado de manera que los trabajadores siempre quedaran endeudados con los dueños de las plantaciones, lo que los mantenía atados a las mismas.

La evolución de las tiendas de raya

Con el paso del tiempo, las tiendas de raya fueron evolucionando. A medida que los trabajadores empezaron a luchar por sus derechos laborales, se fueron implementando leyes que regulaban el funcionamiento de estas tiendas.

En muchos lugares, se prohibió el uso del sistema de crédito y se establecieron regulaciones para garantizar precios justos y condiciones laborales adecuadas. Además, se fomentó la creación de cooperativas y otras formas de comercio justo que permitieran a los trabajadores tener mayor control sobre su propio consumo y economía.

La situación actual de las tiendas de raya

Hoy en día, las tiendas de raya han evolucionado aún más. En muchos países, estas tiendas han desaparecido por completo debido a la implementación de leyes que prohíben su existencia. Sin embargo, en algunas regiones todavía existen tiendas que se asemejan a las tiendas de raya originales, aunque con un enfoque más cooperativo y justo.

Estas tiendas suelen ser gestionadas por grupos de trabajadores o comunidades, con el objetivo de proporcionar productos y servicios básicos a precios accesibles y de calidad. Además, se promueve la transparencia en la cadena de suministro y se busca apoyar a los productores locales.

Las tiendas de raya han experimentado una evolución significativa a lo largo de los años. Lo que antes era una forma de control y explotación laboral, ahora se ha transformado en una oportunidad para promover el comercio justo y el empoderamiento de las comunidades.

Las tiendas de raya en la literatura y el cine

Las tiendas de raya son una parte icónica de la historia de México y han sido representadas en diferentes formas en la literatura y el cine. A través de estas representaciones, se ha explorado la complejidad de estos establecimientos y su impacto en la sociedad mexicana.

En la literatura

En la literatura mexicana, las tiendas de raya han sido representadas como un símbolo de opresión y explotación. En la novela "Pedro Páramo" de Juan Rulfo, por ejemplo, se describe una tienda de raya en el pueblo ficticio de Comala como un lugar donde los trabajadores son obligados a comprar a precios exorbitantes y recibir productos de baja calidad. Esta representación refleja la realidad de muchas tiendas de raya en la época de la Revolución Mexicana.

En la obra "Tiendas de raya" de Jorge Ibargüengoitia, se aborda el tema de las tiendas de raya desde una perspectiva satírica. Ibargüengoitia retrata la absurda burocracia y la corrupción presentes en estos establecimientos, utilizando el humor para criticar la injusticia y la desigualdad social.

En el cine

En el cine mexicano, las tiendas de raya han sido retratadas en películas como "Los olvidados" de Luis Buñuel. En esta película de 1950, se muestra la vida de un grupo de niños que viven en un ambiente de pobreza extrema, y una escena memorable ocurre en una tienda de raya donde los protagonistas son humillados y explotados. Esta representación muestra la realidad de muchas familias mexicanas en esa época.

Otra película que aborda el tema de las tiendas de raya es "El ángel exterminador" también de Luis Buñuel. En esta película surrealista, un grupo de personas se encuentra atrapado en una casa y no pueden salir. En un momento dado, una de las personas sugiere abrir una tienda de raya dentro de la casa, lo que muestra la presencia pervasiva de estas tiendas en la sociedad mexicana.

Conclusiones

Las representaciones de las tiendas de raya en la literatura y el cine mexicano ofrecen una visión vívida de la opresión y la explotación presentes en estos establecimientos. A través de estas obras, se denuncia la injusticia social y se busca crear conciencia sobre la necesidad de cambiar las condiciones de vida de los trabajadores y las familias mexicanas.

¿Existen todavía tiendas de raya en la actualidad?

En la actualidad, las tiendas de raya ya no existen como una práctica común en la mayoría de los países. Estas tiendas surgieron en el siglo XIX como un mecanismo de control y dominación por parte de los dueños de las haciendas hacia los trabajadores. Las tiendas de raya eran establecimientos donde los trabajadores agrícolas podían adquirir productos básicos a crédito, pero a precios exorbitantes y con condiciones desfavorables.

En México, por ejemplo, la abolición de las tiendas de raya ocurrió en la década de 1930, como parte de las reformas laborales impulsadas por el presidente Lázaro Cárdenas. Estas reformas tenían como objetivo mejorar las condiciones de vida de los trabajadores y eliminar prácticas abusivas por parte de los patrones. Aunque la abolición de las tiendas de raya fue un avance significativo, la realidad es que muchas comunidades rurales aún enfrentan condiciones de pobreza y explotación laboral.

En otros países de América Latina, como Argentina y Chile, las tiendas de raya también fueron eliminadas como resultado de las luchas sociales y las políticas laborales implementadas en el siglo XX. Sin embargo, es importante destacar que en algunas regiones rurales y en culturas indígenas, aún pueden existir formas de explotación laboral similares a las tiendas de raya, aunque con diferentes nombres y modalidades.

En términos generales, las tiendas de raya representaron una forma de control y explotación de los trabajadores, limitando su capacidad económica y perpetuando la desigualdad social. Afortunadamente, las reformas laborales y los avances en la protección de los derechos humanos han contribuido a su desaparición en la mayoría de los países en los que existieron.

Las tiendas de raya como ejemplo de desigualdad económica

En la historia de muchos países, podemos encontrar ejemplos claros de desigualdad económica y social. Uno de estos ejemplos es el sistema de las tiendas de raya, que fue muy común en épocas pasadas.

Las tiendas de raya eran establecimientos comerciales que se encontraban generalmente en zonas rurales y que se utilizaban como forma de pago para los trabajadores de las haciendas o empresas. Estas tiendas solían ser propiedad de los dueños de las haciendas o empresas, lo que generaba una relación desigual entre empleadores y empleados.

En estas tiendas, los trabajadores podían adquirir productos básicos como alimentos, ropa y artículos de primera necesidad. Sin embargo, los precios en las tiendas de raya solían ser mucho más altos que en otros establecimientos, lo que generaba un ciclo de pobreza y dependencia económica para los trabajadores.

Además, en muchas ocasiones, los empleadores pagaban los salarios de sus trabajadores en vales o fichas que solo se podían utilizar en las tiendas de raya. Esto limitaba aún más la capacidad de los trabajadores para elegir dónde y cómo gastar su dinero, ya que estaban obligados a utilizarlo en la tienda de su empleador.

Este sistema de las tiendas de raya creaba una relación de dependencia económica entre los trabajadores y los dueños de las empresas, lo que perpetuaba la desigualdad y el abuso laboral. Los empleadores podían controlar directamente los ingresos de sus trabajadores y limitar su capacidad de ahorro y mejora económica.

En la actualidad, el sistema de las tiendas de raya ha sido abolido en la mayoría de los países, ya que se considera una práctica injusta y contraria a los derechos laborales. Sin embargo, es importante recordar la historia y los efectos negativos que este sistema tuvo en la desigualdad económica y social.

El impacto social de las tiendas de raya en las comunidades

Las tiendas de raya han sido parte de la historia de las comunidades rurales desde hace mucho tiempo. Establecidas como una forma de control económico por parte de las empresas hacia los trabajadores, estas tiendas han dejado un impacto social significativo en las comunidades en las que operaban.

1. Dependencia económica

Una de las consecuencias más importantes de las tiendas de raya es la dependencia económica que generaban en los trabajadores. Al ser las únicas opciones de compra disponibles, la gente se veía obligada a adquirir productos a precios más altos de los que podrían conseguir en otros lugares. Esta dependencia generaba un ciclo de endeudamiento constante, ya que los trabajadores tenían que pedir adelantos o créditos para poder comprar los productos de primera necesidad.

2. Desigualdad social

Otro efecto negativo de las tiendas de raya fue la exacerbación de la desigualdad social. Los trabajadores que no podían salir de las comunidades y estaban ligados a las empresas que operaban las tiendas, se veían atrapados en un círculo vicioso de bajos salarios y precarias condiciones de vida. Mientras tanto, los dueños de las empresas se beneficiaban de las ganancias generadas por la venta de productos a precios inflados.

3. Limitación de opciones

Las tiendas de raya también limitaban las opciones de consumo de los trabajadores. Al tener un monopolio en la venta de productos, no ofrecían una variedad amplia de productos y muchas veces la calidad de los mismos era deficiente. Esto llevaba a que las comunidades no tuvieran acceso a una alimentación adecuada y a productos de calidad, afectando su bienestar y salud.

4. Pérdida de autonomía

Otro impacto social de las tiendas de raya fue la pérdida de autonomía de las comunidades. Al depender exclusivamente de estas tiendas para adquirir productos, las comunidades perdían control sobre su economía y se convertían en meros consumidores de los productos que las empresas querían vender. Esto generaba un sentimiento de impotencia y falta de poder de decisión en las comunidades.

5. Resistencia y cambio

A pesar de los impactos negativos, las comunidades también han resistido y han buscado alternativas a las tiendas de raya. A través de la organización comunitaria y la promoción de economías locales, se ha logrado reducir la dependencia de estas tiendas y fomentar el desarrollo económico de las comunidades. Además, la creación de cooperativas y la promoción del comercio justo han sido estrategias para establecer relaciones más equitativas y justas entre proveedores y consumidores.

Las tiendas de raya han dejado un impacto social profundo en las comunidades en las que operaban. Han generado dependencia económica, exacerbado la desigualdad social, limitado las opciones de consumo, restringido la autonomía de las comunidades y han dejado un sentimiento de impotencia. Sin embargo, también ha habido resistencia y búsqueda de alternativas que promueven el desarrollo económico y la equidad en las comunidades.

La lucha por erradicar las tiendas de raya: avances y desafíos

En los últimos años, se ha intensificado la lucha por erradicar las tiendas de raya, una práctica que ha existido por décadas y que ha causado numerosos problemas sociales y económicos. Estas tiendas, que funcionan como establecimientos donde los trabajadores reciben parte de su salario en forma de productos o vales en lugar de efectivo, han sido objeto de críticas y demandas de abolición debido a sus efectos negativos en la dignidad de los trabajadores y en la economía local.

La implementación de las tiendas de raya ha sido históricamente utilizada como una forma de control y explotación de los trabajadores. Al recibir su salario en forma de productos, los trabajadores se ven obligados a comprar exclusivamente en estas tiendas, donde los precios pueden ser más elevados y la calidad de los productos inferior. Esto genera un círculo vicioso donde los trabajadores quedan atrapados en un sistema de deuda con la tienda de raya, dificultando su movilidad y perpetuando su dependencia económica.

Los avances en la lucha contra las tiendas de raya

Afortunadamente, en años recientes se han logrado importantes avances en la erradicación de las tiendas de raya. Organizaciones de derechos laborales y sindicatos han trabajado en conjunto para denunciar esta práctica y presionar por cambios legales que prohíban su existencia. Como resultado, en muchos países se han promulgado leyes que prohíben el pago de salarios en forma de productos o vales, garantizando así que los trabajadores reciban un salario justo y puedan elegir libremente dónde invertirlo.

Otro avance significativo ha sido la implementación de programas de educación financiera y empoderamiento económico para los trabajadores. Estos programas buscan brindarles las herramientas necesarias para administrar adecuadamente su dinero, evitar caer en la trampa de las tiendas de raya y fomentar su inclusión en el sistema financiero formal. Además, se han establecido programas de apoyo para aquellos trabajadores que se encuentren en situación de deuda con las tiendas de raya, brindándoles asesoramiento y soluciones para salir de este ciclo.

Los desafíos que aún persisten

A pesar de los avances, aún existen desafíos significativos en la lucha por erradicar las tiendas de raya. Uno de los principales desafíos es la falta de vigilancia y control por parte de las autoridades competentes. Aunque existan leyes que prohíben esta práctica, su cumplimiento no siempre es garantizado, lo que permite que algunas empresas continúen utilizando las tiendas de raya como forma de control y explotación laboral.

Otro desafío es el cambio cultural que debe ocurrir tanto en los empleadores como en los trabajadores. Muchos empleadores aún ven las tiendas de raya como una forma conveniente de controlar los gastos de sus trabajadores, mientras que algunos trabajadores pueden sentirse cómodos con el sistema debido a su familiaridad. Educar a ambos grupos sobre los impactos negativos de esta práctica y promover alternativas más justas y transparentes sigue siendo un desafío importante.

Conclusiones

La erradicación de las tiendas de raya es una lucha que busca garantizar la dignidad de los trabajadores y promover una economía más justa y equitativa. Aunque se han logrado avances significativos, aún persisten desafíos que requieren la colaboración de gobiernos, organizaciones y la sociedad en su conjunto. Es fundamental continuar promoviendo cambios legales, programas de educación financiera y concientización para lograr la abolición total de esta práctica dañina y asegurar que todos los trabajadores reciban un salario digno y libre de explotación.

Preguntas frecuentes

1. ¿Qué es una tienda de raya?

Una tienda de raya es un establecimiento donde los trabajadores de una empresa o hacienda podían comprar productos básicos a crédito

2. ¿Cuál era el origen de las tiendas de raya?

Las tiendas de raya surgieron en México durante el periodo colonial y se mantuvieron como una forma de control económico y social durante el Porfiriato

3. ¿Cómo funcionaba una tienda de raya?

Los trabajadores recibían sus salarios en forma de vales o fichas, que podían intercambiar por productos en la tienda de raya de la empresa o hacienda

4. ¿Qué productos se podían encontrar en una tienda de raya?

Las tiendas de raya ofrecían principalmente productos básicos como maíz, frijol, arroz, sal, jabón, aceite, ropa y calzado, entre otros

5. ¿Cuál fue el impacto social de las tiendas de raya?

Las tiendas de raya contribuyeron a mantener a los trabajadores en un estado de dependencia y explotación, ya que los precios de los productos eran excesivamente altos y se generaba un ciclo de endeudamiento

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